En nuestra primera
experiencia recorriendo la gastronomía rosarina nos vamos a referir a Ceviche,
la franquicia de sushi y fusión nikkei que abrió sus puertas hace dos meses en
el comercial barrio de Pichincha, más exactamente en Jujuy al 2300.
Un lugar
cinematográfico, en doble altura, con luminaria muy moderna pero muy cálida también,
sillones de cuero continuos y una prolijidad casi obsesiva nos inducen a una
experiencia sensorial casi única, donde podemos interactuar con bartenders y
sushi men si escogemos acomodarnos en la barra, o disfrutar de la amabilidad de
sus mozas si elegimos, clásicamente, disfrutar en alguna de sus mesas, sea en
la planta o en el entrepiso suspendido, dotado de las mismas comodidades.
Detrás de la barra
emerge una pared en doble altura que sostiene una inmensa estructura metálica
que alberga los vinos y champagne de la carta haciendo las veces de cava.
La carta es un interminable catálogo de los diferentes rolls, makis y geishas y sus combinaciones más originales, algunos platos originarios del Perú como el ceviche y el anticucho y platos de autor con preponderancia de productos típicos como los extraordinarios ravioles nero di sepia rellenos de salmón con crema de rocoto y algunos tomates rehidratados que decoran el plato y el paladar, la salsa de soja que acompaña el sushi esta intervenido gloriosamente con salsa de ostras y alguna otra cosita que los invito a adivinar. Un gran lugar, música chilli y la carta de vinos redondean una gran experiencia
Por Marcelo Bruno
Comentarios
Publicar un comentario